A estas alturas ya tienes que saberlo, no hay excusa: una de las partes más importantes de una estrategia de Inbound Marketing es el desarrollo y la creación de contenidos educacionales de alta calidad. En pocas palabras, dentro de la metodología Inbound, tus ofertas de contenido son una de las columnas fundamentales que logran sostener el óptimo funcionamiento de todas las demás acciones. A fin de cuentas, es en las ofertas de contenido y en tu blog, en donde los visitantes de tu sitio web y tus usuarios podrán encontrar la oferta de valor que tienes para ellos.
Sin embargo, escribir no es una tarea fácil, mucho menos si tienes que lidiar a diario con una cantidad considerable de contenido. Como es lógico, la creatividad no es una cualidad permanente y puede llegar a fatigarse. Es en esos precisos momentos en donde tienes que ser más cuidadoso y evitar a toda costa caer en malas prácticas dentro de tu escritura que puedan afectar la calidad del contenido que estás desarrollando.
Así que, lo mejor que puedes hacer dentro de tu proceso de escritura, para evitar que entres en una crisis creativa, es empezar a construir buenos hábitos y buenas prácticas que te ayuden a tener un camino claro para el desarrollo de tus contenidos. Así, a medida que crees una cantidad más significativa de contenidos, lograrás adquirir mayor experiencia en cada una de las prácticas más importantes del proceso de escritura, podrás perfeccionar todo el proceso creativo y de desarrollo de contenidos dentro de tu metodología de Inbound Marketing y, además, también tendrás la capacidad de generar cada vez contenidos de mayor calidad.
Sabemos que escribir contenido digital no es una tarea fácil. Es por eso que hoy, desde X3Media, queremos mostrarte algunos de los errores más frecuentes que se cometen dentro de la escritura de contenido digital, y también queremos mostrarte de qué manera puedes corregirlos para optimizar tu estrategia de Marketing de Contenidos y reforzar la totalidad de tu metodología Inbound.
Entonces, aquí van:
No es lo mismo decir “utilizar” que “usar”, como tampoco es lo mismo usar la palabra “situar” en lugar de “poner”. Usualmente, cuando escribimos nos preocupamos porque el contenido que desarrollamos utilice palabras más complejas y elaboradas que le den un toque de experticia a nuestros textos. Sin embargo, caemos muy rápido en un error que suele ser bastante común en los procesos de escritura: empezamos a rechazar las palabras más simple que, aunque no lo creas, suelen ser las más fuertes.
Entonces, cuando estés escribiendo tus piezas de contenido educacional, bien sea una oferta de contenido o un blog, no pienses tanto en utilizar un vocabulario excesivamente complejo. Puedes usar palabras más elaboradas, por supuesto, pero no dejes de lado aquellas palabras más simples que –precisamente por su simpleza– muchas veces logran crear una comunicación mucho más fuerte con el lector. Además, recuerda que el éxito de tu contenido depende de la capacidad que tenga de impactar y enganchar a tus lectores. Así que, la próxima vez que escribas, recuerda usar palabras contundentes que se dirijan directamente al lector y que les logre comunicar cosas.
Uno de los principales problemas al que nos enfrentamos a la hora de escribir es a la necesidad de decir algo nuevo, a presentar una propuesta de valor que realmente comunique algo a nuestros lectores. Esto es, sin embargo, muy difícil; debido a que actualmente estamos bombardeados con información a cada segundo, lo más usual es que, al escribir, tendamos a replicar las mismas ideas que hemos visto anteriormente.
Aquí puedo aconsejarte dos cosas: primero, analizar muy bien las cosas que lees diariamente para que entiendas qué es lo que realmente quieren decir, y segundo, que a la hora de escribir contenido digital pienses realmente en las necesidades de tus buyer personas y en la manera en que puedes ayudarlos.
Escribir es un proceso, y como todo proceso, toma tiempo. Es usual que, al escribir contenido, nos concentremos en la tarea algunas horas y salgamos de ella lo más rápido posible. Sin embargo, este hábito puede llegar a perjudicar la calidad del contenido que ofrecemos. Para que logremos darle fuerza y sentido a lo que escribimos, es necesario que nos apartemos de ello, que podamos verlo, leerlo y corregirlo con ojos críticos. En pocas palabras, lo que trato de decirte es que, a la hora de escribir, es necesario que desarrolles tu tema y que lo revises varias veces, que trabajes en él el tiempo suficiente para que puedas lograr algo de buena calidad.
Querer ser reconocido por lo que haces, por la experiencia que tienes en tu industria, y por el conocimiento que puedes ofrecerle a tus lectores, no quiere decir que tengas que desarrollar contenidos que sean demasiado serios. Todo lo contrario: una de las principales cualidades de la sabiduría es la capacidad de comunicar los conocimientos de formas interesantes y llamativas. Así que, deja de lado ese tono excesivamente serio y empieza a compartir todo lo que sabes con algo de humor y de manera persuasiva.
Empezar a escribir un contenido desde cero es otro error bastante común a la hora de desarrollar contenido digital. Cuando tienes que empezar a lidiar con un volumen de contenido considerable, lo mejor es que establezcas procesos que te ayuden a generar contenido de manera más efectiva. Por ejemplo, algo que puedes realizar es desarrollar un formato que te ayude a construir una estructura clara que manejarás en todos los artículos de tu blog o en todas las ofertas de contenido que realices. Una estructura básica consiste en una pequeña introducción, el contenido al que haces referencia, y una conclusión clara. Sin embargo, tu puedes crear tu propia estructura, pensando en que se adapte de forma más estrecha a los buyer personas de tu compañía.
Estos fueron algunos de los errores más comunes que se cometen a la hora de escribir contenido digital y las respectivas formas para corregirlos. Si en tus prácticas diarias no cometes ninguno de ellos, ¡te felicito! Dale rienda suelta a tus ideas. Si por el contrario ves que aquí se ven reflejadas algunas malas prácticas dentro de tu escritura, no te alarmes; corrígelas cuanto antes y empieza a optimizar tu estrategia de Marketing de Contenidos ya mismo.